LIMPIANDO LAS VASIJAS

Circulo Virtuoso



Pasaje

No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cual es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta. (Romanos 12:2)


Oración

Señor Jesucristo, Tú puedes entrar a todas las habitaciones de ésta vida que es mi casa. Llena hasta el último rincón de mi ser. Me presento delante de Ti buscando ser sano en Tu Nombre. Elijo perdonar, me entrego una vez más, haz el miagro, obra una vez más.


Declaración

Para la acción de hoy, te vendría muy bien una parrilla. Hemos estado anotando cosas en nuestra hoja de ruta de la semana. Toma esa hoja y elige perdonar, sanar y entronizar a Cristo una vez más. Que nada ni nadie de tu pasado, tenga el poder de seguir lastimando tu corazón. Renuncia y rompe o prende fuego ese papel, tan lleno de historias y recuerdos que hoy comenzamos a curar.

Desarrollo

Hemos comenzado la semana declarando una verdad maravillosa y fundamental: hemos nacido de nuevo, somos nuevas criaturas.

Queremos llevar nuestras vidas en el Nombre de Jesús, del círculo tortuoso del que hablábamos ayer, al círculo virtuoso de la obra de Jesús.

El apóstol Pablo, enseña que la ruptura, se da en la renovación de la mente.

No nos amoldamos, es decir no tomamos la forma del mundo, sino nos presentamos delante de Dios cada día, humildes, confesándonos necesitados de Él.

Cuando hablamos de renovación de la mente, no estamos de leer el próximo libro cristiano que se ponga de moda. Tampoco estamos hablando de sabernos más versículos bíblicos de memoria, es decir, no hablamos de crecimiento intelectual.

Hablamos de entendimiento.

Es la combinación de nuestro mejor esfuerzo por entender, pero conscientes de la necesidad de la revelación de Dios.

Por supuesto que leer más será bueno, pero ponernos humillados delante de Dios y pedirle al Espíritu Santo que me guíe a la verdad, es la clave.

Recordar de la mano de Dios

Entender bajo Su dirección.

El círculo se rompe cuando derribamos las fortalezas mentales enfermas, llenas de conceptos errados acerca de quien soy y todo lo que creo de mí lo llevo a los pies de Cristo. Declaro lo que creo cada día. Me levanto en el Nombre de Jesús a proclamar el Plan de Dios para mí y las bendiciones que vendrán. Sobre todo, declaro que no estoy solo jamás, porque Él me ama y está conmigo.

Para sanar mis emociones de las violencias recibidas, necesito un milagro. Le pido a Dios que me visite y me sane. No quiero olvidar, busco recordar y no llorar, que el dolor me abandone y lo vivido, sirva de testimonio para otro.

Con mi mente renovada y mis emociones sanadas, decidir de acuerdo a la Voluntad de Dios será más simple.