EN FAMILIA

Porciones

Día: 11 - Semana: 2 - Autor: Pastor Bernardo Affranchino

Siguiente →


Pasaje

Ahora, pues, temed a Jehová, y servidle con integridad y en verdad; y quitadde entre vosotros los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto; y servid a Jehová. Josue 24:14


Desarrollo

La vida demanda continuamente tomar decisiones. En el versículo siguiente al que elegimos para hoy, Josué plantea un desafío central: “Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Jehová.” Practicar o poner en practica nuestra fe, tiene que ver con elegir lo mejor. En el Salmo 119, el rey David, le record a su propia alma, que la porción que tenía elegida es Jehová. Esa decisión no es de un momento, sino que de toda una vida, hacia la eternidad. Recordemos su misericordia y su favor. Leamos el vs 17 “porque Jehová nuestro Dios es el que nos sacó a nosotros y a nuestros padres de la tierra de Egipto, de la casa de servidumbre; el que ha hecho estas grandes señales, y nos ha guardado por todo el camino por donde hemos andado, y en todos los pueblos por entre los cuales pasamos. Y Jehová arrojó de delante de nosotros a todos los pueblos, y al amorreo que habitaba en la tierra; nosotros, pues, también serviremos a Jehová, porque él es nuestro Dios.” Dios tiene para nuestra familia una vida gloriosa, victoriosa, poderosa, una vida óptima. Si Cristo es el Señor de tu vida, si estás permitiendo que controle tu vida y a tu familia para la gloria de Su nombre. Como creyentes, no seamos familias que negamos la fe al no proveer para nuestra casa. Ese proveer es hacer todo lo necesario para que nuestra familia cumpla la voluntad de Dios; nuestra familia debe ser el más hermoso testimonio de que Cristo reina en nuestra vida. Elegimos para nosotros la mejor porción, la cual es Dios y la servimos a los demás. ¿Qué puedo hacer hoy por los de mi casa, que sea una real bendición?