Camino a la Cruz 2019

Día 3 | Isaias 53:3

Día: 3 - Semana: 1 - Autor: Pr. Bernardo Affranchino

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Pasaje

Despreciado y rechazado por los hombres, varón de dolores, hecho para el sufrimiento. Todos evitaban mirarlo; fue despreciado, y no lo estimamos.


Oración

Señor te pido que me ayudes a imitar a Cristo. Que yo no corra detrás del aplauso humano, sino del beneficio del prójimo. Que yo no me autocalifique por lo que dicen los demás, sino que esté pendiente de Tu voz. Que yo tenga temor. Comencemos a orar por el vía crucis, cada hermano que actuará o servirá en las diferentes áreas como vestuario, armado o ujieres y muchas más.


Declaración

Ayer hablábamos acre de cuantas veces, los planes de Dios, no siguen nuestro método o nuestro parecer. Hoy deberíamos pensar y dar gracias por la gran cantidad de veces que Dios llama y usa a los incorrectos.

Desarrollo

El Salvador anunciado, no solo era un niño y tenía

la paz como marca (como mencionábamos ayer),

sino que además era poco atractivo a los ojos de

los demás.

Isaías 53, fue escrito varios cientos de años antes de que

Jesús naciera. Es notable el detalle con que el profeta

anuncia, no solo la llegada del Cristo, sino detalles del

desarrollo de Su vida en medio de los hombres, con un

detalle fantástico.

Allí, entre el capítulo 53 y 54, está la cruz, la redención, el

abandono de los más cercanos, la misión de Dios y al alcance

de la obra redentora del Cristo, del Mesías. Algunos

comentadores del Antiguo Testamento, mencionan que pareciera

de que fue escrito después de la muerte de Jesús,

por la exactitud de la profecía, pero las pruebas históricas

y arqueológicas, son contundentes al decir que hay manuscritos
del texto mencionado de más de 500 años antes del
nacimiento de Jesucristo. Mano de Dios.
Aquí Isaías le avisa a Israel, que cuando el Mesías llegue,
no debería ser juzgado con ojos humanos, no debe ser calificado
por cuestiones tales como familia de proveniencia o
apariencia física. Hay que mirar adentro, escuchar, aprenderé
y sentir su palabra y el poder de Dios a través de Él.
¡Gracias a Dios por los inadecuados!
En un tiempo donde la apariencia física ha tomado una
trascendencia inusual, Jesús no cumple el estándar.
En un siglo donde el éxito es indispensable y se marca por
los que te alaban, Jesús iría a la cruz en medio de ladrones.
En ésta época en la que sacrificarse por el otro de manera
desinteresada, es muy desubicado, Jesús dará todo, aún la
vida, por sus hermanos.
En días de egoísmos, Jesús encarna el Amor de Dios.