2ª Reyes



Pasaje

“Jehová amonestó entonces a Israel y a Judá por medio de todos los profetas y de todos los videntes, diciendo: Volveos de vuestros malos caminos, y guardad mis mandamientos y mis ordenanzas, conforme a todas las leyes que yo prescribí a vuestros padres, y que os he enviado por medio de mis siervos los profetas. Mas ellos no obedecieron, antes endurecieron su cerviz, como la cerviz de sus padres, los cuales no creyeron en Jehová su Dios” (17:13-14)


Oración

Hoy me consagro nuevamente a Tí.


Declaración

Este libro, quiere demostrar el destino que espera a todos aquellos que se niegan a hacer de Dios su verdadero líder. Al igual que decíamos ayer, el autor es desconocido. Posiblemente Jeremías o un grupo de profetas. 1 y 2 de Reyes, originalmente, formaban un solo libro.

Desarrollo

A lo largo de este período oscuro, la Biblia menciona treinta profetas que proclamaron el mensaje de Dios al pueblo y a sus líderes. Los más notables de estos valientes hombres de Dios son Elías y Eliseo. Conforme Elías se acercaba al final de su ministerio terrenal, Eliseo pidió una doble porción del espíritu de su amado mentor (2). Muy poco tiempo después, Elías es llevado a los cielos en un torbellino y Eliseo llega a ser el vocero de Dios para el reino del norte. La vida de Eliseo está llena de señales, proclamaciones, advertencias y milagros. Cuatro de los más memorables son los siguientes, el aceite que fluía (4), la curación del hijo de la sunamita (4), la curación de la lepra de Naamán (5), y el hacha que flotó (6). Aun en medio de las terribles situaciones, Dios tendrá su minoría fiel, su remanente (19). Él desea hombres y mujeres valientes que proclamen su verdad. Reflexión La corriente del río de la sociedad está fluyendo rápida y furiosamente, arrastrando hacia abajo todo a su paso. Sería fácil dejarse llevar por la corriente. Pero Dios nos pide que nademos en contra de ella. No será fácil, pero será lo correcto. En éste libro leemos acerca de gobernadores malvados, idolatría difundida y gente complaciente, que ciertamente arrastran hacia abajo. A pesar de la presión a dejarse llevar por la corriente, apartarse del Señor y servir sólo a uno mismo, una minoría de gente se movía en la dirección opuesta. Elías se resistió y dejó una marca y luego Eliseo mostró que Dios no sólo controla grandes ejércitos, sino además sucesos de la vida diaria. Cuando escuchamos y obedecemos a Dios, nos muestra Su poder para transformar cualquier situación. El cuidado de Dios es para todos los que están dispuestos a seguirlo. Él puede hacer grandes milagros en nuestras vidas. Dios es paciente con nosotros. Él nos da muchas oportunidades de escuchar Su mensaje. Su paciencia no significa que sea indiferente a la forma en la que vivimos, sino que predica acerca de un amor que no cambia por nuestros actos y una misericordia extrema, para todo el que lo busca.